Nuestra historia comenzó, más o menos, en noviembre de 2015; Dios nos habló por intermedio de nuestro pastor Mario Castillo (Ipa Neuquén, Argentina),
llamándonos al Ministerio y que nos sacaría a no más de 80 kilómetros de la ciudad.
Después se fue dando todo hasta llegar a Cabrero. Nunca nos imaginamos esta gran y hermosa responsabilidad. Todo se hizo tangible unos meses
después; el 16 de Abril de 2016, fuimos presentados en Santiago, como Obreros a Cabrero.
Debido a la pandemia, se tuvo que entregar el lugar que arrendábamos como templo, y solo se ha trabajado en forma virtual.